Estoy en un punto de la vida donde dos de los grandes pilares de mi vida son un reverendo fracaso: el amor y el trabajo.
Primero como les he comentado anteriormente fue el amor. Pero me quedaba mi adorado trabajo. Ahora ...el trabajo. A veces por mucho esfuerzo, o por mucha pasión que se le imprima, no se obtienen lo resultados que otras personas esperan. Me encanta mi trabajo pero, a mis superiores parece que no.
Mañana tomaré las cosas de otra manera pero por lo menos hoy me voy a dar el chance de sentirme triste y de la fregada. A lo mejor mañana lo tomo como un reto y me dedicaré a mejorar. Pero hoy, por lo menos hoy, no tengo ganas de nada.
Hoy me siento como esta canción del Tri (que no me encanta este ¿grupo?)... Por lo menos el día de hoy, estoy oficialmente deprimida.
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