Ya pasó mi cumpleaños. Dolió menos de lo que pensé y todo gracias a que ese día tuve el honor de ser la Madrina de Primera Comunión de mi sobrinito Brandon. Desde la mañana no tuve tiempo de pensar en la quebrada de corazón que me dieron el dia anterior y la mentada de madre que vino en la noche por parte de la mismita persona (no hay nada peor que una mala intención disfrazada de buena....y no hay nada peor que después de hacer fregaderas ser la Marga López de la historia).
En fin, que anduve desde temprano compradole sus calzones a mi sobrino (se me habia olvidado) y llegué a vestirlo. Los zapatos jamás me acabaron de gustar, pero se veia guapo (como su tia). Nos fuimos ambos a la iglesia a cumplir nuestro compromiso. Realmente yo estaba mas nerviosa que mi niño, llegue y me senté bien cuquis junto a mi mami y Alexis (mi otro mini super sobrinito). Esperamos a que iniciara. Entraron los niños que harían su comunión formaditos. Al ver a mi sobrinito, como buena chillona, se me escaparon dos lagrimitas. Fue algo muy importante para mi, ya que aunque no soy muy religiosa que digamos, es un compromiso que sellé de por vida con mi sobrinito.
Pues bien, mi nueva comadre la Chompis y su marido Eleazar (que es a toda mami, por cierto), hicieron una fiesta sensasional. Sencilla, familiar pero divertida. La mala noticia fue que no bebí nada (esto de manejar..) pero si me la pasé muy bien. A la hora del pastel me cantaron las mañanitas y me dijeron las tipicas bromas de "Ya te vamos a rifar", pero ahora andaba tan pero tan de buenas que les respondí... "Si, si...yo les digo el nombre de a quien quiero que le vendan todos los boletos".
Se terminaron mis 31 años. Ahora tengo 32, que los inicio con una nueva actitud y nuevas esperanzas. A las personas que formaron parte de mi camino y que ahora seguimos por rutas distintas, les digo que Dios los Bendiga y que siempre, como sea busquen la felicidad. Les pido disculpas si los ofendí, o si les hice daño. Por mi parte yo ya tengo un nuevo cometido que estoy dispuesta a cumplir: Ser Feliz.
En fin, que anduve desde temprano compradole sus calzones a mi sobrino (se me habia olvidado) y llegué a vestirlo. Los zapatos jamás me acabaron de gustar, pero se veia guapo (como su tia). Nos fuimos ambos a la iglesia a cumplir nuestro compromiso. Realmente yo estaba mas nerviosa que mi niño, llegue y me senté bien cuquis junto a mi mami y Alexis (mi otro mini super sobrinito). Esperamos a que iniciara. Entraron los niños que harían su comunión formaditos. Al ver a mi sobrinito, como buena chillona, se me escaparon dos lagrimitas. Fue algo muy importante para mi, ya que aunque no soy muy religiosa que digamos, es un compromiso que sellé de por vida con mi sobrinito.
Pues bien, mi nueva comadre la Chompis y su marido Eleazar (que es a toda mami, por cierto), hicieron una fiesta sensasional. Sencilla, familiar pero divertida. La mala noticia fue que no bebí nada (esto de manejar..) pero si me la pasé muy bien. A la hora del pastel me cantaron las mañanitas y me dijeron las tipicas bromas de "Ya te vamos a rifar", pero ahora andaba tan pero tan de buenas que les respondí... "Si, si...yo les digo el nombre de a quien quiero que le vendan todos los boletos".
Se terminaron mis 31 años. Ahora tengo 32, que los inicio con una nueva actitud y nuevas esperanzas. A las personas que formaron parte de mi camino y que ahora seguimos por rutas distintas, les digo que Dios los Bendiga y que siempre, como sea busquen la felicidad. Les pido disculpas si los ofendí, o si les hice daño. Por mi parte yo ya tengo un nuevo cometido que estoy dispuesta a cumplir: Ser Feliz.
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